Una de las campañas más importantes que se han realizado en la ciudad de Iquitos ha sido la de la recuperación del patrimonio arquitectónico. En 1986 se declararon más de 90 inmuebles y espacios urbanos como patrimonio de la nación. Lamentablemente, este sólo fue un proceso temporal y frágil. A partir de los años sesenta se vio con mayor fuerza que los grandes movimientos económicos y sociales, generadores de riqueza súbita y artificial, reiteraron esa efímera vocación de hacer dinero y huir, la cual hirió de muerte al patrimonio urbano, a manos del mal gusto y la permisividad oficial.
De una política de conservación y respeto, hemos pasado a una de abandono oficial y privado. Salvo la campaña de los años ochenta y noventa, de revaloración, en la actualidad el desorden y caos urbano, así como el abandono del centro histórico de Iquitos, se han agravado. La ausencia y promoción de espacios y grandes núcleos de difusión artística o arquitectónica son una triste realidad.
Sin embargo, en medio de este paisaje de abandono negligente y cómplice, se ha contrapuesto en los últimos tiempos un saludable movimiento de rebeldía contra la barbarización urbana, a través del redescubrimiento del valor inmanente de la historia y su acondicionamiento reflexivo con los vaivenes de la modernidad, el medio ambiente y el paso del tiempo. La intervención urbana, como posibilidad de creación de espacios efímeros pero memorables, se ha ido consolidando en el desarrollo de procesos vinculados con este fin.
Algunas de las características más saltantes de la intervención urbana que se realiza actualmente en Iquitos son las siguientes:
Algunos ejemplos de intervención urbana efímera reciente en Iquitos son los siguientes:
Festival de Belén. Se realiza desde el año 2005 durante el mes de agosto, en época de vaciante del río, en la zona baja del barrio de Belén. Interviene la zona a través del pintado de fachadas de casa de colores fuertes y alegres. En medio de esa dinámica, se crean espectáculos artísticos, talleres, performances y campañas de salud preventiva. Los beneficiarios son la población y el espacio intervenido es el distrito en sí.
Procesión del Niño de la Caja. Manifestación artístico-religiosa que busca concientizar sobre los derechos de los niños trabajadores de Iquitos. Realizado y organizado por Asociación La Restinga desde el año 2006. Consiste en una procesión por principales calles de Iquitos, llevando en andas la imagen del Niño de la Caja, un pequeño lustrabotas en actitud beatífica. Se generan Intervenciones lúdicas en las diversas estaciones, creadas en calles de toda la ciudad. Cierre con fiesta, música popular amazónica y una serie de instalaciones audiovisuales. El espacio intervenido son las calles por donde pasa la procesión.
Festival de arte urbano Estamos en la Calle. Se realiza desde el año 2008. Abarca todo el arte oficial y no oficial de Iquitos, usualmente de artistas jóvenes o emergentes. Su día central consiste en la intervención de una plaza céntrica y una calle adyacente, en la cual se coloca un escenario, stands de trabajo artístico y espacios para difusión de trabajos artísticos. Incluye pintado de murales en casas adyacentes, espacios de trabajo artístico libre (grafiti, cerámica, motocross), presentaciones de grupos musicales, performance, cine, declamación y teatro.
Instalación “Escenarios” Marco Sueño Saldaña. Realizada en marzo del 2010, bajo el proyecto “Emergencia artística en Iquitos” del INC Loreto, el cual se refiere a la idea de una ciudad en situación de emergencia y, al mismo tiempo, a la aparición de artistas con propuestas novedosas en un escenario en proceso de desarrollo. El artista visual Marco Saldaña tomó por sorpresa espacios públicos del centro y alrededores de la ciudad de Iquitos, enfrentándonos a imágenes que sugieren una reflexión en torno a nuestra identidad indígena y el riesgo en que se encuentran nuestras manifestaciones culturales más auténticas.
Concierto Contraestructuras. Realizado en abril del 2010, como un modo de generar conciencia favorable al patrimonio arquitectónico. Consistió en un concierto, experimentación sonora, con la participación especial de la artista sonora Pauchi Sasaki, acompañada por la Orquesta Sinfónica de Loreto, a través de una instalación artística sobre la fachada derruida de ex Palacio Municipal de Iquitos, que se complementó con una performance visual de evocación y denuncia de los atentados contra los monumentos históricos de la Amazonía.
La recuperación de los espacios urbanos, históricos y artísticos, como se ve, han sido fundamentales para plantear una nueva revolución cultural en Iquitos.
Francisco Bardales
Blog Diario de IQT.